Investigaciones recientes indican que el cannabis podría ser una de las formas más efectivas para manejar los síntomas de la endometriosis, una condición que afecta aproximadamente al 10% de las mujeres en edad reproductiva. La endometriosis, caracterizada por el crecimiento del tejido endometrial fuera del útero, provoca dolor intenso, incomodidad y otros síntomas debilitantes que impactan significativamente la calidad de vida de las mujeres.
“Los resultados sugieren que la Cannabis se ha convertido en un método popular de autogestión para posiblemente tratar síntomas relacionados con la endometriosis”, escribieron los autores. “Esto ha llevado a una mejora sustancial en los síntomas”.
El estudio, publicado este mes en la revista *Gynecologic Endocrinology and Reproductive Medicine*, analizó respuestas de 912 pacientes adultas con endometriosis en Alemania, Austria y Suiza. De estas, 114 pacientes (17%) reportaron usar marihuana para ayudar a controlar la condición, una enfermedad inflamatoria crónica relacionada con el crecimiento de células fuera del útero, lo que puede causar una variedad de síntomas dolorosos. Estas pacientes informaron una reducción significativa del dolor y una menor necesidad de recurrir a otros medicamentos, como opioides.
De hecho, dentro del número de participantes, el 75,9% de las participantes de una clínica informaron que el cannabis era “muy” o “moderadamente” eficaz para aliviar los síntomas de la endometriosis. Estos números superan los métodos convencionales de tratamiento, lo que sugiere que el cannabis podría ser una alternativa viable y efectiva.
Además del alivio del dolor, el cannabis también ha mostrado beneficios para mejorar el sueño y reducir síntomas psicológicos como ansiedad y depresión, que a menudo acompañan a la endometriosis. Aproximadamente el 90% de las usuarias reportaron una reducción en el uso de analgésicos convencionales, y casi la mitad de ellas lograron disminuir su consumo en más del 50%.
“La mayor mejora se observó en el sueño (91%), el dolor menstrual (90%) y el dolor no cíclico (80%)”, mostraron los resultados de la investigación en alemán. “Además del aumento de la fatiga (17%), los efectos secundarios fueron poco frecuentes (≤ 5%)”.
La endometriosis afecta entre el 2% y el 20% de las mujeres en edad reproductiva, según el estudio. En promedio, las entrevistadas dijeron que les llevó unos nueve años recibir un diagnóstico.
A pesar de estos resultados prometedores, es crucial que se realicen más estudios clínicos para comprender mejor los efectos del cannabis, especialmente a largo plazo. Algunas usuarias informaron efectos secundarios, como aumento de la fatiga, que puede considerarse tanto un efecto adverso como un beneficio, dependiendo de la situación.
“El posible uso de cannabis resultó en una mejora significativa de los síntomas, yendo más allá del control del dolor, y la mayoría de las usuarias lograron reducir la ingesta de analgésicos”, señala el informe. “Los efectos adversos se consideraron raros. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para determinar la mejor vía de administración, dosificación, proporción THC/CBD, efectos secundarios potenciales y efectos a largo plazo del uso de cannabis”.
“El estudio indica que hay un interés y una demanda significativa por opciones terapéuticas adicionales”, agrega, “y el cannabis podría potencialmente convertirse en una parte importante de un enfoque terapéutico multimodal para ayudar con la endometriosis”.
El estudio fue realizado por un equipo de investigación del Departamento de Ginecología del Centro de Cirugía Oncológica del Centro de Investigación de Endometriosis Charité, en Berlín, Alemania.
“En el momento del estudio”, señalaron los autores, “el consumo de cannabis aún era ilegal en Alemania, Austria y Suiza, y la cannabis medicinal rara vez se prescribía debido a los requisitos complejos”.
Sin embargo, destacaron que las opciones terapéuticas existentes “no siempre proporcionan un alivio suficiente del dolor y con frecuencia causan efectos secundarios desagradables”. Las investigaciones anteriores eran limitadas y sugerían que el cannabis podría no ser particularmente efectivo, escribió el equipo, pero “investigaciones transversales con pacientes con endometriosis de Australia, Nueva Zelanda, Canadá y EE.UU. mostraron que las estrategias de autogestión son muy comunes en estas pacientes y que el cannabis y los productos de cannabis se encuentran entre los más efectivos para reducir el dolor”.
Estos hallazgos refuerzan la necesidad de considerar el cannabis como parte de un enfoque holístico e individualizado en el tratamiento de la endometriosis, mientras se realizan más investigaciones para explorar plenamente su potencial terapéutico.